La industria gastronómica está dando un giro. Cada vez aparecen más emprendimientos que se preocupan del medio ambiente, de no generar basura y aportar a un comercio justo. Y qué mejor si además, ofrecen productos ricos y sanos. Las cápsulas compostables de Café Señor K, la granola Ruda y las hamburguesas vegetarianas Furku, ¡confirman que aún hay esperanza!
Por: María José Winter / @mjosew
Se dice que la naturaleza en su forma, es perfecta. Y que lo que viene de la tierra, está hecho para volver a ella. Y si ya generamos residuos, tenemos que hacernos cargo. Todos aquellos que reciclan o hacen compost, entenderán el placer que provoca sentir que esa “basura” tendrá un mejor futuro. Hoy quisimos rendirle un pequeño homenaje a tres emprendimientos chilenos que además de surfear las dificultades típicas de una pyme, decidieron tener procesos sustentables.
¿Sabían que el mercado del café produce más de 59 mil millones de cápsulas al año? ¿Y que pueden demorar hasta 500 años en descomponerse? Cifras suficientes para que tres amantes de este grano se motivaran a desarrollar la primera línea de cafés de especialidad en envases 100% compostables de Chile. Café Señor K nace en 2016 con el objetivo de ser parte del cambio, creando estas cápsulas que desaparecen por acción microbiológica mediante el proceso de compost. “Conectamos caficultores y consumidores a través de granos cargados de historias, tostados día a día en Chile y que vienen en envases compostables para que juntos no dejemos huella”, señala Rodrigo Jaeger, uno de los fundadores junto a Mirko Pavlovic y Martín Rozas.
Con ello, buscan crear la identidad cafetera de nuestro país, entregando productos frescos, recién tostados y evitando tuestes excesivamente altos que matan el sabor. Dentro de su línea, tienen para cafeteras Nespresso, café de grano y molido en bolsas, todas ellas de abono orgánico fabricados en PLA.
¡Y ojo con este dato! Porque para sacar el máximo provecho al proceso, una vez preparado tu café, deja secar la borra, ojalá en una bandeja con papel de diario expuesta al sol. Puedes guardarla en un recipiente o tupper y utilizarlo mezclándolo con tierra para reducir plagas.
Pero hay más
Una granola y una hamburguesa que no generan residuos. “Desde antes de la pandemia, como sociedad atravesamos por una crisis de salud importante. La mayoría de los productos que consumimos carecen de nutrientes vivos. Es urgente tomar conciencia y aprender a comer para recuperar nuestra salud física, emocional y mental”, comenta Antonia Necochea, creadora junto a su amiga María José Silva de la marca Ruda que ofrece un producto infartantemente rico.
Ellas prefieren no llamarla ‘granola’, ya que lo consideran un suplemento multivitamínico que no contiene avena, ni gluten, ni azúcar y está libre de alérgenos comunes, siendo amigable con todo tipo de ecologías intestinales. Es una fórmula hecha de forma casera con semillas de primera calidad, cranberries y un sabor único, que comenzaron a vender en febrero del 2020 en plena pandemia.
Lo mejor, es que la venden a granel en bolsas compostables de medio y 1 kilo, que puedes cortar en pedacitos, enterrar directamente en tu tierra o agregarla a tu compost. “Fabricamos Ruda dos veces por semana. Nos juntamos, ponemos música y la hacemos con mucha alegría y amor. Basta con observar lo que está pasando a nivel planetario para darse cuenta que no tenemos tiempo para seguir viviendo desde un lugar de comodidad. Utilizar un envase que no fuera orgánico no era una opción. No podemos seguir normalizando la cantidad de basura que generamos como especie”, remata Antonia.
Y por último, pero no por eso menos importante, llegamos a Furku, un emprendimiento que nació de un ramo de innovación de la Universidad de Talca. Fue en ese contexto donde a Fernanda Rey y Javiera Ríos se les ocurrió hacer hamburguesas de cochayuyo, porque sabían que esta alga tan frecuente en Chile estaba estigmatizada y no se valorizaban sus innumerables propiedades.
Siguiendo las tendencias en alza de la alimentación consciente, sostenible y vegetariana, decidieron también ser amigables con el planeta. “Comenzamos a ser súper conscientes de la huella dañina que dejaba el ser humano en prácticamente casi todas las interacciones que realiza diariamente. Y si íbamos a ser conscientes con los animales, también lo deberíamos ser con nuestro medio ambiente y sociedad”, afirma Fernanda.
Es por eso que sus cajas son reciclables y las hamburguesas vienen dentro de bolsas biodegradables y compostables. Además, trabajan con los procesos naturales del cochayuyo; sin explotarlo, haciendo comercio justo con el alga y fomentando la economía interna de la región usando materia prima del Maule. Así han sido capaces de crear tres maravillas: la súper hamburguesa de cochayuyo, garbanzo con sabor betarraga; el mix de cochayuyo garbanzo con zanahoria curry; y por último, la mezcla de cochayuyo con lenteja y espinaca. ¡Deliciosas, nutritivas y les prometo que sin sabor ni olor a cochayuyo para los más mañosos!
Así que ya saben. Opciones ricas y que además son un aporte al planeta, hay por montones. Sólo es cosa de averiguar y apoyar a aquellos emprendedores que se la juegan por un mundo mejor.
Instagram: @cafesenork / Web: cafesenork.com
Instagram: @ruda.granola / Web: www.rudagranola.cl
Instagram: @furkuchile / Web: www.furku.cl
